Hasta la vista baby: una lectura de la novela «Jellyfish» de Carlos Godoy

Publicado por Guillermo Portela en

Ilustración::Gastón "Pupi" Mougabure Cueto

Hasta la vista baby: una lectura de la novela «Jellyfish» de Carlos Godoy

Ilustración:: Gastón «Pupi» Mougabure Cueto.

Texto:: Guillermo Portela.

El presente artículo plantea un análisis de la retórica del “silencio” como un acto consciente, una necesidad por escribir aquello que no se puede decir a viva voz, pero es necesario cristalizar y, aun así, no se lo quiere dotar del poder performativo que acarrea la palabra escrita. Por tal motivo, se ha de camuflar, elidir o trivializar.

Yakie, la protagonista de la novela es una estudiante universitaria de 19 años que confirma un embarazo no deseado en medio de la Argentina dividida por el debate de la despenalización del aborto. En forma de diario íntimo, el relato configura una voz capaz de representar ternura, ironía, ferocidad, inteligencia, liviandad. Así, la narración va adecuando el registro de voz a las circunstancias y el momento, a la forma y al contenido del enunciado. De esta multiplicidad de registros solo elegiremos aquellos momentos en que la voz narrativa escoge elidir, o alivianar, el peso simbólico del contenido.

A lo largo del relato, la autora del diario parece buscar formas alternativas que mitiguen el peso emocional que pueden tener ciertas palabras. Por ejemplo, el conflicto que altera a Yakie es, sin dudas, su estado de gravidez y sobre esto reflexiona: “soy una chica de 19 años que está embarazada…No, pregnant– suena mejor, menos dramático y hasta gracioso-” (2019, p 29). La elección de la palabra en inglés (pregnant), en lengua extranjera, no funciona ni como un modismo, ni como una pedantería intelectual, sino, como una alternativa que le asegura a la narradora un distanciamiento del hecho, una frivolización que no es inconsciente y le otorga un placebo que desacraliza la seriedad del momento. Este artilugio queda evidenciado en las cavilaciones que, con irrefutable lucidez, realiza en torno de la escritura de Irene Vilar: “Creo que es centroamericana, pero escribe en inglés, ¿podés ser más cipaya?… No son desclasados por escribir en inglés en vez de escribir en su lengua materna -en este caso, el español-, son desterritorializados” (2019, p 13). En esta cita, Yakie no solo aborda el concepto de desterritorialización desde la perspectiva que Deleuze y Guattari mentaron para entender el proceso de escritura que llevó adelante Franz Kafka, sino que también, nos permite pensar que el mecanismo que ella realiza con su propia prosa es un desplazamiento que dista mucho del exotismo arbitrario de usar anglicismos.

Tal vez, más evidente es el procedimiento que realiza cuando tiene que mencionar al posible bebé que espera. Esta palabra, “bebé”, que resume todos los problemas que atraviesan a la protagonista, es suplantada, en el comienzo del diario, por el anglicismo “bby”. Por ejemplo, cuando discurre sobre lo arbitraria que puede ser “la vida o no de un bby -o lo que podría llamar una idea de bby-dentro de [su] cuerpo” (2019, p 8). Este acrónimo, “bby”, es muy usado en las redes sociales para abreviar simplemente la palabra inglesa, “baby”, es decir, chico/a, bebé. Sin embargo, también podría ser usada como una abreviación de la expresión de la lengua anglosajona “bye bye boy”, que traducido a la lengua española significa literalmente “adiós chico” o “adiós muchacho”. En esta segunda acepción del acrónimo no solo estaría la sustitución de la palabra en español “bebé”; sino que también, en esas escuetas tres letras subyacería su ansiada despedida: “bye bye”.

A medida que avanzan los hechos, Yakie llegará a un nuevo apelativo en inglés para evadir la palabra “bebé”: “jellyfish”. Este mote funcionará en la novela de dos formas diferentes. Por un lado, como ya dijimos, servirá para eludir la mención de la palabra “bebé” y, por el otro, dotará al feto de una connotación poco afable como la que puede tener un pez gelatinoso.

Cosa muy distinta le ocurre con la palabra “aborto” que parece no tener problema en mencionar. Pues quizás el aborto se presente en estas circunstancias como la solución, el objetivo por el que se lucha, la militancia del momento, el aliado que entra en conflicto con la maternidad no deseada vista como una afección: el “bby”, el “jellyfish” que es el obstáculo, el “alíen [que me crece] dentro que me come y me chupa la energía y las ganas de vivir” (2019, p 17).

Estos procedimientos, de mentar en una lengua que no es la materna las palabras “bebé” o “embrazada”, tal vez sean, en primer lugar, un subterfugio que neutralice la gravedad de un conflicto que supera la esfera individual. En una segunda instancia, podríamos pensar que también es producto de una incapacidad de poder nombrar o poner un título a dicho conflicto que se presenta como una fatalidad. Algo similar ocurre en la novela Matadero Cinco, de Kurt Vonnegut, donde el protagonista, que vivenció el bombardeo más encarnizado de la Segunda Guerra Mundial, se ve imposibilitado de poner en palabras la tragedia que atravesó y se limita a mencionarla con un inarticulado “pio-pio-pi” (Vonnegut 1991, p 25).

De esta suerte, la voz que surge de la prosa del diario de Yakie parecería advertir que la mera mención del problema, el hecho de nombrarlo o escribirlo en letras que lo constituiría corpóreo, sería en definitiva el acto performativo que le daría la irrefutable existencia; en cambio, lo ajeno del vocablo en lengua extrajera, lo lejano y fugaz de un modismo, nunca dejará de ser una letra contaminada, es decir, un edificio de naipes que el lenguaje acabará por demoler ante la flaqueza de las palabras huecas. Así, a lo que no se quiere dar entidad, se lo aleja, se lo frivoliza creando, por un lado, el sentido de una pasividad y, por el otro, neutralizando la desesperación del deseo.

Bibliografía
– Deleuze, G. y Guattari, F. (1978). Kafka. Por una literatura menos. México: Ediciones Era, S.A.
– Godoy, Carlos (2019), Jellyfihs. Diario de un aborto. Buenos Aires: Tusquets.
– Ramírez Rave, J. M. (2016). “Hacia una retórica y una poética del silencio”. Revista CS, no. 20, pp. 143-174. Cali, Colombia: Facultad de Derecho y Ciencias Sociales, Universidad Icesi.
– Vonnegut, Kurt (1991). Matadero Cinco. Buenos Aires: Editorial Anagrama.

Ilustración::Gastón "Pupi" Mougabure Cueto

Categorías: La letra descarriada